sábado, 31 de octubre de 2009

Mi pequeña compañera de bicicleta

Siempre se levanta antes que yo. Me despierto a eso de 10 o 10 y media y ella ya ha desayunado y hecho su cama. Cuando aún no me ha dado tiempo ni de ir al servicio, ella ya está detrás mía diciéndome: “¿Vamos a ir hoy con la bici”? Y yo, con voz de dormía le contesto: “Sí, ¿no?”. Tras mi respuesta se va corriendo a su cuarto empieza a preparar su mochila en la que hecha: un paquete de pañuelos, una botella de agua, algo de dinero y su teléfono móvil.
Mientras ella hace todo esto, yo desayuno y también hago mi cama. Luego nos vestimos juntas en mi habitación, le decimos adiós a nuestra madre y a nuestra hermana chica y nos vamos al patio a sacar la bicis.
Desde hace cuatro domingos seguimos el mismo trayecto. Recorremos parte de nuestro barrio hasta llegar al camino de bicis, subimos la cuesta que esta al lado del varadero, seguimos el camino de bicis y luego cruzamos hacia la iglesia de San García y la llevo hasta una tienda de chuchería a que se compre unas patatas. Después de comprar nos vamos al parque del centenario, que por cierto es uno de mis sitios favoritos, y nos quedamos un rato allí sentadas. Mutuamente nos contamos los respectivos cotilleos de nuestros colegios y nos reímos muchísimo. Al cabo de un rato volvemos a casa.
Lo que más me impresiona de ella es la resistencia que tiene, yo me canso antes que ella. Sólo una vez en todo el camino me dice que paremos un rato para beber agua, pero tampoco es una parada muy larga, sólo de un par de minutos.
Cuando llegamos a la casa se mete del tirón a ducharse y luego me ducho yo.
La verdad es que me gustan muchos eso domingos que paso con mi hermana.

2 comentarios:

  1. Que envidia... A ver si algún día aprendo yo también por fin a montar en bici, no? xD
    Besos ^^

    ResponderEliminar
  2. Pues ya sabes cuando aprendas a montar en bici te vienes con nosotras jejejej

    Besos ^^ gracias por visitar mi blog =)

    ResponderEliminar